Cinco Villas

Acércate a nuestras villas y descubre sus rincones, su bella arquitectura de herencia señorial e indiana, la historia y esencia del Bajo Nalón. Pasea, disfruta y deténte a disfrutar del paso del tiempo, de nuestra gastronomía, de recuerdos imborrables.

Villa de Muros del Nalón

Muros de Nalón

El nombre de Muros evoca el origen castreño y romano de esta preciosa villa sobre la rasa costera en alusión a la edificación defensiva que hubo en tiempos pretéritos sobre los terrenos de lo que hoy es la Plaza del Marqués de Muros.

  • La Plaza del Marqués de Muros, construida en el siglo XVI para albergar el mercado semanal concedido a la villa por el Rey Carlos I y que aún se celebra los sábados. El lugar ideal de encuentro y solaz de vecinos y visitantes, a la sombra de sus centenarios edificios de arquitectura popular, la Iglesia de Santa María (s. XVIII), la Casa de Cultura, la Casa Consistorial (s. XIX) y el Monumento al Marqués de Muros que preside la plaza.
  • Admirar la imponente la puerta plateresca del Palacio de Valdecarzana y Villahermoso (siglo XV), del que se conserva sólo parte de la torre central y las murallas que lo rodeaban. Durante la Guerra de la Independencia fue ocupado por las tropas francesas y entre sus muros se alojó el Mariscal Ney, el más famoso y cruel de los mariscales de Napoleón, quien ordenó el saqueo e incendio de Muros en 1809.
  • Seguir los pasos de los peregrinos del Camino de la Costa a Santiago por los barrios de Era, Muros y Villar.
  • Pasear y perderte hacia el barrio de Reborio desde la Plaza siguiendo las murallas del Palacio del Marqués de Muros.
  • Asomarte a rincones escondidos desde lo que tendrás espléndidas vistas a la Ría del Nalón.
  • Recorrer los lugares donde se rodaron afamadas películas del cine hecho en Asturias a través de la ruta turística “Muros de Nalón, un escenario de cine”.
  • Acercarte a recorrer los paisajes litorales de la Senda de los Miradores de Muros de Nalón.
  • El Festival Gastronómico del Pixín en Semana Santa.
  • La procesión, actividades y verbenas de las Fiestas de San Antonio en junio.
Villa de Pravia

Pravia

Pravia refleja en la espléndida arquitectura monumental de sus animadas plazas y calles el poder de la que fue sede la corte del Rey Silo, centenaria villa noble y burguesa que hoy celebra concurridos eventos culturales y festivos a lo largo del año. El lugar ideal para llevarte de tu viaje los mejores productos hortofrutícolas de las fértiles vegas pravianas o alguno de sus afamados quesos.

  • Hacerte un selfie junto a la estatua del Rey Silo que preside la plaza, todo un icono del pasado de Pravia como capital del Reino de Asturias, o junto a la escultura “La Hilandera”, a la entrada del parque, que rinde homenaje al arte de hilar que realizaban de forma admirable las mujeres pravianas.
  • Pasear, dejar que el tiempo fluya y rememorar el pasado de esta villa noble en la Plaza Sabino Moutas, con la espléndida arquitectura barroca del Palacio de Moutas, la Colegiata de Santa María la Mayor y las Casas de los Canónigos, un conjunto único construido en el s. XVIII por Fernando Arango Queipo, quien fuera obispo de Tuy y gran benefactor de la Villa.
  • Entrar a la Colegiata para descubrir los magníficos tesoros artísticos que alberga en su interior, como el retablo mayor y los laterales, las tallas de artistas de la época, los cuadros del Via Crucis o el magnífico órgano que data de 1780, uno de los más antiguos de la región.
  • Pasear o detenerse a descansar en la bella Plaza Marquesa de Casa Valdés, con sus casonas, palacios señoriales y fuentes que datan del s. XVII: la Casona de Busto, la Casa Consistorial, la Casona de López de Grado, el Palacio de la Marquesa de Casa Valdés o La Fontana.
  • Disfrutar de un aperitivo, una comida o un café en cualquiera de las animadas terrazas y locales hosteleros y gastronómicos, mientras admiras la arquitectura burguesa de la villa.
  • Pasear por el barrio de Prahúa, que reúne una buena muestra deedificios indianos de estilo ecléctico, que incluye mansiones de tipo modernista y chalets de estilo montañés.
  • Subir al barrio del Güeyu hasta la Capilla de Nuestra Señora del Valle, cuyos orígenes se remontan al s. XI, para descubrir uno de los mayores tesoros renacentistas de Asturias: la imagen de laVirgen del Valle, patrona de Pravia, en un retablo atribuido a Juan Bautista Portigiani, de la escuela de Donatello.
  • El espectáculo de color en las plazas y calles engalanadas con alfombras florales y ornamentales durante la celebración del Corpus Christi en junio.
  • El Festival Intercéltico de Pravia en junio.
  • Las Fiestas del Santísimo Cristo de la Misericordia y Nuestra Señora del Valle en septiembre.
  • El Xiringüelu, la mejor y más espectacular romería de Asturias que, desde hace más de 75 años, congrega el primer fin de semana de agosto en torno a las casetas del Praú Salcéu junto al Nalón a miles de personas en un ambiente de confraternización y diversión.
  • La animada programación de actividades culturales y de conciertos en la villa durante los meses estivales.
  • Visitar sus mercados tradicionales, ferias y exposiciones de los mejores productos de la huerta.
  • Llevarte una variedad de los deliciosos quesos artesanales que se producen en el concejo, que gozan del mejor reconocimiento nacional e internacional.
Villa de Soto del Barco

Soto del Barco

Situada en la margen izquierda del río Nalón y con incomparables vistas a sus vegas fluviales y a la ría, Soto del Barco, que debe su nombre a la antigua embarcación que servía para cruzar el río antes de la construcción del Puente de La Portilla, conserva distintos edificios herencia del poder indiano y es el lugar ideal para comenzar nuestra visita a la comarca.

  • Las vistas desde el Mirador del Palacio de Magdalena (s. XVIII), hoy un espléndido y lujoso hotel al que se suma el centro de convenciones y eventos más grande de Asturias. Desde este privilegiado enclave se divisan espléndidas vistas de la ría del Nalón, El Castillo, San Esteban, Muros y La Arena.
  • Las panorámicas a las vegas del Nalón camino a su desembocadura y a la Isla de Arcubín, con la mayor plantación de kiwis de la región, y sus islotes fluviales cercanos.
  • Admirar la arquitectura modernista de estilo ecléctico del Salón-Teatro Clarín, ubicado en el Parque Herminio Noval, donde también se encuentran las escuelas, la Iglesia de San Pedro, la Casa Consistorial. El teatro data de 1920 y fue edificado con capital indiano, sirviendo fundamentalmente en la temporada veraniega como cine, teatro y también baile. Rehabilitado a principios de este siglo, fue reinaugurado en 2005 y es sede de una importante actividad cultural con exposiciones, teatro y proyecciones.
  • El paseo por el barrio de La Magdalena, donde encontrarás singulares y bellos edificios levantados con capitales indianos.
  • Bajar caminando hasta los pintorescos embarcaderos en la ribera del Nalón.
  • Seguir los pasos de los peregrinos del Camino de la Costa a Santiago en su caminar desde El Castillo para subir a Soto y seguir hacia el Puente de La Portilla para cruzar el Nalón.
  • Asomarte a rincones escondidos desde lo que tendrás espléndidas vistas a la Ría del Nalón.
  • El mercado semanal de los domingos.
  • El Festival Gastronómico de la Angula que se celebra en el mes de marzo.
  • Las actividades y verbenas de las Fiestas de San Isidro en mayo.
Villa de San Esteban de Pravia

San Esteban

A principios del siglo XX, San Esteban, se convirtió en el primer y único puerto carbonero de España, siendo hoy un conjunto histórico de patrimonio industrial único en España. Pasear por su puerto y paseo marítimo es rememorar las épocas de esplendor del carbón y los barcos de vapor, los tiempos en que Rubén Darío escribía versos en sus fondas, mientras te asomas a espléndidas vistas de la ría del Nalón que fluye hacia fundir sus aguas con el Cantábrico.

  • Fotografiar las imponentes grúas del puerto, que datan de 1929-1930 y son todo un icono del turismo industrial en Asturias.
  • Recorrer desde la estación de tren la Senda Carbonera, un tramo de la Senda Norte que discurre por el antiguo tendido ferrroviario a través del casco urbano hasta las viejas tolvas y los cargaderos en la bocana de la ría, la imagen característica de San Esteban y las mejores atalayas hoy al puerto y a la ría, con inmejorables vistas a La Arena
  • Saborear el carácter marinero de la villa en el puerto deportivo, donde anclan numerosas embarcaciones pesqueras y de recreo. Llevarte un recuerdo marinero.
  • Pasear por la Plaza Altamira y admirar sus edificios de arquitectura burguesa, portuaria e industrial, entre los que destacan la herencia indiana de la bella Casa Altamira o el soberbio edificio de la Junta de Obras del Puerto. Detenerse a reponer fuerzas en sus terrazas y animados cafés y restaurantes.
  • Caminar por el paseo marítimo hacia el el Dique Oeste (1895-1907) y el Dique Norte (1928-1944), hasta los cuales bien merece la pena un paseo, pues desde ellos se pueden divisar espectaculares panorámicas de la ría, de la prodigiosa costa acantilada y de bellas playas por la que discurre la Senda de los Miradores hacia el oeste, y de la Playa de Los Quebrantos y el Monumento Natural del Playón de Bayas y la Isla de Deva hacia el este.
  • Tomar el sol o darte un chapuzón en la rocosa Playa de El Garruncho.
  • Bañarse en las Piscinas de Agua Salada junto al Club Náutico al final del paseo a la ribera de la ría.
  • La Iglesia Parroquial de San Esteban, singular edificio de una nave y construcción abovedada flanqueada por dos torres, con grandes ventanales y lienzos acristalados que le dan una bella luminaria natural y realzan las imágenes del Cruficado y la Virgen del Carmen que acoge en su interior.
  • Visitar la antigua Capilla de Roque en las alturas del pueblo, desacralizada hace años para convertirla en el Centro Cultural y Auditorio Tito Fernández, en homenaje al gran cineasta y productor natural de San Esteban.
  • El Festival Gastronómico del Pixín en Semana Santa.
  • El espectáculo único de la procesión marinera y las fiestas en honor a la Virgen del Carmen en julio.
  • Un paseo náutico por la ría a bordo del Barco Turístico La Carmela. ¡Te cautivará!
Villa de L'Arena

La Arena

Pueblo de pescadores de gran tradición marinera y conservera, La Arena es el paraíso de la mejor angula del mundo, la que se da en la ría del Nalón. Una joya de las villas marineras asturianas que sorprende y cautiva por su belleza y tranquilidad, donde relajarse contemplando la subida de la marea desde su puerto o las puestas de sol en la ría que evocaron los poetas Rubén Darío, Seamus Heaney y el pintor Joaquín Sorolla. En La Arena te esperan baños de mar en la impresionante Playa de Los Quebrantos, días de surf, navegación y pesca, tranquilos paseos y buena mesa. Todo un lujo cantábrico.

  • Acercarte al puerto pesquero y deportivo y disfrutar del sabor marinero de la villa, observando la salida y amarre de las embarcaciones a faenar o navegar por la ría del Nalón.
  • Recorrer a cualquier hora del día, pero en especial al atardecer, el paseo marítimo hacia la bocana de la ría, admirando la escultura homenaje “El barco de Rubén Darío” y rememorar el verano que pasó el poeta nicaragüense en La Arena y los versos que dedicó a esta estampa inigualable el poeta irlandés Seamus Heaney, premio Nobel de Literatura.
  • Visitar la exposición permanente en el Centro de Interpretación Puerta del Mar, que recrea con paneles expositores y medios audiovisuales las artes de pesca de la angula en la ría, las antiguas fábricas de la industria conservera que dio prosperidad a la villa y las vidas de las carboneras y gandingos que hace décadas “pescaban” carbón en el río y en la playa… ¡Te enamorará conocer su historia!
  • Asistir una noche de invierno hasta la madrugada a las faenas de los anguleros en la ría, iluminada sólo por las estrellas y las luces de las embarcaciones.
  • Asistir a la subasta de la angula en la Rula de La Arena, la única Lonja de Pescadores de España dedicada a la subasta de la más preciada captura de las rías cantábricas, un edificio de 1917 de arquitectura singular ubicado frente al puerto que por sí mismo bien merece la visita, durante los meses de noviembre a febrero.
  • Degustar a la mesa la joya de la ría y sus preparaciones culinarias en los restaurantes de la villa durante el Festival Gastronómico de la Angula que se celebra en el mes de marzo y es Fiesta de Interés Turístico Regional. ¡Una experiencia foodie única!
  • Pasear por la orilla y sumergirte en las aguas del Cantábrico en la Playa de Los Quebrantos ante un paisaje litoral único. Dejar que tus pasos te lleven por un arenal infinito que se extiende hacia el Playón de Bayas, con la mágica silueta de la Isla de Deva al horizonte. Asombrarte de las vistas de la costa desde el Mirador de El Pozaco.
  • Disfrutar de la práctica del surf en la playa, una de las mejores de Asturias para las olas y en la que hay 2 escuelas para introducirse en la práctica de este deporte.
  • Disfrutar del paso del tiempo en el centro de la villa junto a las pérgolas de la Plaza del Pescador y admirar la singular arquitectura neogótica de la Iglesia de San Juan y de bellos edificios de estilo indiano como la Casa del Observatorio o la Casa de Chalín.
  • El espectáculo pirotécnico de color y fuego de la Foguera de San Juan en junio, una noche mágica, y la procesión marinera de la mañana siguiente, Fiesta de Interés Turístico Regional.
  • La procesión marinera y las fiestas en honor a San Telmo a finales de septiembre.
  • Asistir a la llegada del personaje del Angulero por Navidad, cargado de regalos para los más pequeños.